El 24 de Agosto de 1989, en La Piedad Michoacán, ocurrió un evento digno de recordar para los Rodríguez Martínez: su tercera hija había nacido. La gorda, morena y china de la casa (sí, cómo no!, los que me conocen bien saben que ni estoy gorda ni morena ni china.. bueno.. un poko d cada uno, pero muy poco..). Hoy, en el 2008, 19 años después, ésta muchacha logra celebrarse sin la necesidad de sus padres.
Claro que se toma el tiempo para ir a saludarlos y esperar el acostumbrado regalo de cumpleaños; pero no por un gesto de mujer interesada... bueno, sí, un poco, pero no es sólo por tener ese dinero. La cámara d la que tanto hablo en este blog que nadie lee, está prácticamente en mis manos. Ahora sólo necesito que mi tía que vive 'en el otro lado', venga de vacaciones con mi pequeña joyita, lista para ser estrenada. Así es.. ya tengo ocho mil ñecas para mi cámara.
Mi cumpleaños fue el motivo perfecto para conseguir dinero fácil, fue poco dinero, pero fue fácil. Claro que los mejores regalos no siempre son los papelitos pintados que tienen tanto valor entre la sociedad; si no más bien, el estar con las personas a quien tanto quiero y que m hacen sentir tan especial.
Tuve mi viernes bitch y mi sábado m&m. El viernes dí la vuelta como los viejos tiempos, música a todo volumen, las 6 de nosotras juntas en el pequeño 'cachorro', fotos aquí, allá y tacos al final de la noche. Mi sábado fue más tranquilo, digno de mi amada bolita de ñoños, un café, una buena charla... algo innegable. El domingo (ayer) fue cuando cumplí mis 19 veranos. Vaya día para cumplirlos... Domingo... Maldito año bisiesto que me mueve mi celebración. No es muy agradable, pues por ser domingo, te has de levantar tarde, comer tarde... y no celebrar, pues no haces prácticamente nada en el séptimo (¿o primer?) día de la semana.
Y si a esto le sumas el hecho de que estoy estudiando en Guadalajara, y que como había ido a pasar el fin de semana a mi natal ciudad de La Piedad, debía gastar mi tarde en la carretera, regresando a la capital jaliscience, deduces rápidamente que el domingo no es el mejor día para un cumpleaños.
Ya estaba yo algo deprimida frente a mi laptop, sentada en mi depa, conciente de que tenía yo mucha tarea de economía para hacer, cuando recibo una llamada que iluminó mi día.. o el final de éste, pues. Maye me felicita y me invita a cenar. ¡Fer, Carson, Ivonne, Wendy y Max vienen en camino para celebrar mi cumpleaños!
Y yo que creía que ya se había acabado (eran pasadas de las nueve de la noche cuando Maye marcó, y nótese que yo ya me había dado por vencida y estaba en pantuflas a punto de cenar chocorroles). Fuimos a cenar crepas a algún lugar raro, al cuál no supe ni cómo llegamos, pero estuvo muy agusto. Platicamos mucho, nos reímos mucho y ... nos fuimos a casa de Carson a hacer tarea de economía... Así es, no podíamos olvidar que era domingo y que no teníamos la tarea del lunes hecha; como buenos estudihambres.
Dieron las tres, casi cuatro de la mañana cuando terminamos de copiar las notas de Ivonne, quien celestialmente había adelantado casi toda la tarea. Fue más cotorreo que estudio, como de costumbre.
Llego a mi depa a las 4 y tantas a.m., finalizando mi cumpleaños de la mejor manera. Cotorreo con los mejores compas del mundo.
Patos, Bitches, M&m. Los adoro, mil gracias por todo.
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